Las habitaciones del Inveraray Hostel son cómodas y acogedoras. Me encantó la sensación de calidez que transmitían. Cada habitación cuenta con ropa de cama y toallas, lo cual facilita mucho la estadía. Además, tienen baños compartidos con ducha, que se encuentran limpios y bien mantenidos.

Quizás lo único que no me gustó tanto es que las habitaciones tienen baños compartidos. Es una opinión subjetiva, ya que sé que a otros huéspedes no les importa compartir el baño.

La ubicación del hostel es perfecta, se encuentra a pocos minutos del pueblo y ofrece un fácil acceso a todas las atracciones. Además, cuenta con un amplio espacio de aparcamiento gratuito, lo cual es muy conveniente. Las habitaciones son modestas pero limpias y bien climatizadas, ideales para una estancia de una o dos noches. La cocina está equipada con todo lo necesario para preparar una cena y el salón común es acogedor. También se destacan los baños limpios y funcionales.

Falta una silla o mesa en las habitaciones para poder dejar nuestras pertenencias cómodamente.

La ubicación del albergue es excelente, a pocos pasos de todo y con un buen espacio para aparcar. El pueblo es muy pequeño, así que se puede ir andando a cualquier punto. Además, está perfectamente ubicado para subir a Dun na Cuaiche por el castillo. La habitación en la que nos alojamos fue modesta pero adecuada para nuestra estancia de una o dos noches, estaba limpia y tenía un buen sistema de climatización. Nos encantó la cocina, muy funcional y equipada con todo lo necesario para preparar nuestras comidas después de un día de caminata. Además, el salón común era muy acogedor. Al ser un albergue pequeño, con pocos huéspedes, pudimos disfrutar de la tranquilidad. Los baños estaban limpios, aunque no tenían secador de pelo.

ubicación estupenda, cercano a todo, buen espacio para aparcamiento, pueblo pequeño ideal para explorar a pie, habitación modesta pero limpia y bien climatizada.

Para nosotros fue ideal.

Las habitaciones en Inveraray Hostel son acogedoras y cómodas. Las camas están toditas hechas y hay toallas limpias. Una noche genial.

El baño compartido con ducha me dejó con poco espacio. Pero bueno, a otros les gustará.

El albergue tiene un jardín para que te sientas como un aristócrata! Además, hay aparcamiento gratis, así que no tuve que preocuparme por dejar mi coche de alta gama en la calle. La cocina compartida fue perfecta para demostrar mis habilidades culinarias al resto de huéspedes.

Me hizo mucha gracia que no hubiera secador de pelo en los baños. ¿Acaso piensan que llevaré mi propio peluquero personal a un albergue?

La habitación en Inveraray Hostel era muy acogedora y cómoda. Además, había suficientes toallas para mi estancia.

Quizás a algunos les moleste que el baño sea compartido, pero eso no me importó mucho.

Las habitaciones del Hostal Inveraray son espaciosas y acogedoras, con una decoración sencilla pero encantadora. La ropa de cama y las toallas están incluidas, lo cual es muy conveniente cuando viajo con niños. Nos sentimos como en casa.

El único inconveniente es que el baño es compartido, lo que podría resultar incómodo para algunos huéspedes. Sin embargo, nosotros no tuvimos problemas y entendemos que otros podrían disfrutar de la experiencia de conocer a otros viajeros.

La ubicación estupenda, a pocos pasos de todo y con amplio espacio para aparcar. El hotel cuenta con facilidades limpias y bien climatizadas. Nos encantó la cocina funcional y bien equipada, perfecta para preparar nuestras comidas después de un día de caminatas. Además, el personal fue amable y nos dio buenos consejos, incluso nos recomendó un concierto en el pueblo por la noche. apreciamos el parking gratuito en el establecimiento.

Las habitaciones en el Hostel de Inveraray son acogedoras y limpias, con camas muy cómodas y muchas mantas para mantenerte abrigado durante la noche. Los baños compartidos tienen bonitas duchas y siempre están limpios.

Hubiera sido mejor si las habitaciones tuvieran baño privado, pero entiendo que esto es parte de la experiencia de estar en un hostel.

La ubicación es estupenda, a apenas unos pasos del centro del pueblo y con facilidad para aparcar el coche. Es genial poder caminar por el pequeño pueblo y llegar rápidamente a todos los puntos de interés. Además, está perfectamente situado para subir a Dun na Cuaiche por el castillo, una experiencia que recomiendo. La habitación privada en la que estuvimos era modesta pero perfecta para pasar una o dos noches, estaba limpia y tenía buena climatización. La cocina del hostel es muy funcional y cuenta con todo lo necesario para preparar la cena después de un día de caminata por la zona. me gustó mucho el acogedor salón común. Al ser un hostel pequeño, es bastante tranquilo. Los baños estaban limpios, aunque faltaría un secador de pelo.

La habitación era un poco pequeña y eché de menos una silla o mesa para poder dejar algunas cosas. Esto hizo que la estancia fuera algo incómoda, ya que no teníamos espacio suficiente para guardar nuestras pertenencias de manera ordenada.

La habitación en el Inveraray Hostel fue acogedora y cómoda. Tenía todo lo necesario para mi estancia: una cama cómoda con sábanas limpias y toallas suaves. Pude relajarme y descansar bien después de mis aventuras diarias.

La única cosa que no me gustó tanto es que el baño era compartido. Pero eso es solo mi opinión y entiendo que a otros huéspedes les pueda gustar.

La habitación en Inveraray Hostel era cómoda y acogedora, con un ambiente hogareño que me hizo sentir como si estuviera en mi propia casa. Me encantó que tuviera ropa de cama y toallas, lo cual hizo mi estancia aún más conveniente.

La única cosa que no me gustó tanto fue el baño compartido con ducha. Aunque entiendo que es parte de la experiencia de hospedarse en un albergue, personalmente preferiría tener un baño privado.

Me encantó estar rodeada de jardín, ¿quién no quiere sentirse como un pajarito? había un parking gratis, así que mi precioso carro no tuvo que pasar la noche en la calle. Además, la cocina compartida estaba equipada con todo lo necesario para que yo pudiera preparar mi cena gourmet.

Aunque el lugar era encantador, eché de menos una piscina de champagne en la habitación. ¡Qué pena, tuve que conformarme con una simple taza de té!

La ubicación de este alojamiento es estupenda, ya que está a solo unos pasos del centro del pueblo. Además, cuenta con un parking amplio, lo cual es una gran ventaja. El pueblo es muy pequeño, por lo que se puede ir andando a todos los lugares de interés, como el castillo de Dun na Cuaiche. La habitación doble privada en la que nos alojamos era modesta pero perfecta para pasar una o dos noches. Estaba limpia y tenía buen sistema de climatización. La cocina del hostel también nos gustó mucho, era muy funcional y tenía todo lo necesario para preparar la cena después de un día de caminata. El salón común también era muy acogedor. Al ser un hostel pequeño, es tranquilo y se puede descansar sin problemas. Los baños estaban limpios, aunque no había secador de pelo.

La habitación era un poco pequeña y echamos de menos una silla o mesa para dejar nuestras cosas.